Un extracto bancario es un resumen formal proporcionado por las instituciones financieras en el que se detallan las transacciones y la información sobre el saldo de una cuenta específica durante un período determinado. Estos extractos, que se emiten periódicamente (normalmente cada mes), documentan claramente los ingresos, los reintegros, las comisiones, los intereses y los saldos inicial y final.
Los extractos bancarios son un registro financiero esencial. Permiten a particulares y empresas realizar un seguimiento de sus hábitos de gasto, verificar pagos y depósitos, y detectar cualquier actividad no autorizada. Supervisar detenidamente cada extracto bancario mensual ayuda a identificar rápidamente discrepancias o posibles fraudes.
La mayoría de los bancos modernos ofrecen versiones electrónicas y físicas de los extractos bancarios. Los extractos bancarios electrónicos (e-statements) se han vuelto cada vez más populares, ya que proporcionan a los clientes un cómodo acceso en línea en cualquier momento y reducen el consumo de papel.
Además, los extractos bancarios desempeñan un papel crucial en la verificación de la estabilidad financiera o el historial de transacciones. A menudo son necesarios para obtener préstamos, acreditar la residencia o respaldar reclamaciones financieras. Las personas que desean solicitar hipotecas, contratos de alquiler o emprender importantes proyectos empresariales suelen considerar necesario presentar extractos bancarios precisos y actualizados.
En última instancia, revisar y comprender regularmente sus extractos bancarios fomenta una mayor conciencia financiera y puede mejorar significativamente las estrategias de gestión financiera y presupuestaria personal.